Centre Terre es una asociación francesa sin fines de lucro que agrupa a espeleólogos con competencias complementarias y cuya motivación es organizar expediciones espeleo-geográficas a zonas remotas del planeta.

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La primera incursión en Patagonia remonta a 1995, cuando un reducido grupo realizó el primer viaje de reconocimiento a la isla Diego de Almagro, curiosos por saber si los afloramientos de caliza en una zona tan austral del planeta estaban karstificados, es decir, si se habían formado sistemas subterráneos explorables.

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Lo que encontraron aquellos avezados exploradores les obligó a inventar expresiones para describir la belleza de los lapiaces y formaciones de superficie de Diego de Almagro y Madre de Dios y está espléndidamente narrado en el libro "L'île aux Glaciers de Marbre", del cual el Ministerio de Bienes Nacionales de Chile decidió hacer una edición especial en español con el fin de que sirviera de instrumento de difusión de una zona prácticamente desconocida de Chile.

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El vínculo de Centre Terre con lo que ellos dieron en llamar los Glaciares de Mármol los llevó a iniciar una estrecha relación de colaboración con el Ministerio de Bienes Nacionales. Sus hallazgos y estudios permitieron que el Archipiélago Madre de Dios fuese declarado en 2007 Bien Nacional Protegido, figura de protección que perdura hasta hoy.

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El convenio de colaboración firmado en 2016 y renovado en 2019 entre el Ministerio de Bienes Nacionales y Centre Terre es un reconocimiento al trabajo de exploración, investigación y difusión realizado por estos hombres y mujeres y pretende sentar las bases que permitan avanzar en el proceso de postulación del Archipiélago Madre de Dios a Patrimonio Natural Mundial de la Humanidad.

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Centre Terre autofinancia sus expediciones. En la fase de preparación se invierten grandes esfuerzos en levantar los fondos que hacen posibles las expediciones Última Patagonia. El apoyo financiero suele provenir de privados y de organismos que colaboran, ya sea a través de donativos o bien con la prestación de servicios sin costo. Sin su colaboración, las expediciones no serían posibles. No obstante, más del 50% del presupuesto de las expediciones la asumen, sin excepción, los mismos integrantes del equipo, quienes participan de forma voluntaria, no retribuida y pagan sus vuelos y cuota de participación. Es la fuerza de un sólido equipo que se organiza en torno a su pasión y que finalizó con éxito su última aventura, la expedición Última Patagonia 2023.